En esta época del año la piel se vuelve más seca y sensible, el frío, los cambios bruscos de temperatura y la falta de humedad que se produce en invierno hacen aumentar la deshidratación, por lo que es importante aportar a nuestra piel una ración extra con los productos adecuados.
El ACEITE DE ALMENDRAS DULCES, es de los aceites más adecuados para el invierno por su gran efecto protector, ayudando a la piel a no deshidratarse y a que el cuerpo entre en calor.
Ayuda a prevenir las estrías y puede mezclarse con el aceite de rosa mosqueta para potenciar sus efectos regenerantes, además es utilizado para el tratamiento de masajes por su capacidad de suavizar la piel sin obstruir los poros.
Si quieres tener una piel brillante esta Navidad, te recomendamos que además de hidratar y cuidar tu piel con aceites, evita utilizar agua muy caliente, ya que reseca mucho más la piel y bebe mucho agua ya que refuerza la estructura de la piel y la mantiene elástica e hidratada.